miércoles, 20 de noviembre de 2013

EL CLUB DEL LIBRO AUMENTA SUS DIOPTRÍAS

Tras su fallecimiento, se ha reeditado todo Tom Clancy, ha salido un nuevo Astérix y García Márquez ha dejado una preciosa carta de despedida, pero nosotros seguimos enfrascados en nuestras peripecias interiores, y esto es lo que hemos leído en nuestro club del libro:
 
EUREKA, de Edgar Allan Poe. Tras un preámbulo en el que nos hace desear leer el ensayo, tenemos un galimatías difícil. Pero, ah, en las últimas cuatro páginas nos desvela el secreto de Dios y el Universo, al que ha llegado mediante su método analítico y la intuición, como Dupin. Por tanto, al menos ese final es imprescindible leerlo.   
 
THE SECRET HISTORY (EL SECRETO) de Donna Tartt. Muy recomendable, y pronto tendremos aquí una entrada completa al respecto.
 
Opiniones desencontradas tenemos sobre PÓRTICO, de Fredrik Pohl, por las altas expectativas que suscitaba al recibir tantos premios. Obras entretenidas son PETIRROJO, de Jo Nesb o Ríos de Londres de Ben Aronovitch.
 
Muy buenas referencias estamos teniendo de las lectoras que se han lanzado con el último de Julia Navarro (Dispara: yo ya estoy muerto) o novelas de éxito como El despertar de la señorita Prim de Natalia San Martín o La ladrona de libros de Markus Zusak.
 
Se reivindican obras de adolescencia como Edad Prohibida de Torcuato Luca de Tena o en otros casos se llega a la conclusión de que no eran tan deslumbrantes: es el caso de La insoportable levedad del ser, de Milan Kundera.
 
Tras hacer un repaso a la alta tradición clásica griega con Antígona, Edipo y la Orestíada, bajamos todos al mundo bestseller con el tito Stephen King, del que esperamos Doctor Sueño (segunda parte de El Resplandor) y que quede claro que 22/11/63 es muy recomendable, con eso que él sabe hacer tan bien al hacer tan natural lo increíble. Es fantasía realista, si se permite ese oxímoron.

jueves, 24 de octubre de 2013

POE, EL CRÍTICO INNATO

He revisado la novela de Mathew Pearl "La Sombra de Poe". Tiene un arranque  que engancharía a cualquier aficionado a Allan Poe, con un protagonista que desea se rehabilite al escritor y una ambientación perfecta. Pero existen algunos fallos argumentales. Por ejemplo, no casa la exhaustiva documentación histórica con la entrada de los personajes franceses, queriendo hacer un híbrido entre la novela detectivesca analítica y racional, ejemplificada en Duponte, y el pulp aventurero, expuesto en el maravilloso personaje del Barón C. Dupin y su esposa, la letal Bonjour.  Quizá la investigación debería de haber sido llevada por sus únicos allegados, de una forma discreta tras su solitario entierro. Mis protagonistas bien pudieran haber sido Nelson Poe o la señora Clemm. Empecé a leer esta novela hace muchos años, y la aparqué, hasta que hace poco he podido terminarla, porque me daba igual en qué personaje se hubiera podido inspirar Poe para crear a su detective, y las conspiraciones desde París. Para colmo, el mejor personaje de la novela es asesinado prontamente, y a día de hoy su tesis sobre la muerte de Poe me sigue pareciendo más cabal que la final. Fuera asesinado o no, sí que trataron, infructuosamente, de matar su fama, reprobándolo por borracho. ¿No contaba Poe con ni tan siquiera un defensor entre los escritores hasta que llegó Baudelaire? La verdad es que Poe era orgulloso, altanero en exponer su superioridad crítica e intelectual al resto de los escritores, que se defendían de este rival blandiendo siempre su acusación de borracho. La causticidad de los escritores los lleva a que todos quieran verlo caer o cambiar, como convirtió la sociedad a Oscar Wilde en un ser asustadizo y triste. En próximas entradas analizaré los ensayos y críticas de Poe, que no sólo juzgaba a los libros que no le gustaban, sino que los pulverizaba, con expresiones como "si creía que no había un libro tan tonto como :::::::::: en toda la faz de la tierra, era porque aún no había leído :::::::::".  Vamos, que supongo que mucha gente se alegró de su triste circunstancia final. Y qué curioso, Poe ha sido reconocido después como el maestro de la huella profunda en la Historia de la Literatura, y eso es más importante que las flaquezas o deméritos que tienen sus cuentos y poemas. 

jueves, 26 de septiembre de 2013

LA MUERTE DE IVÁN ILICH

Acabo de apartar mi vista de la última página de esta obra, y ahora que tengo fresco todo lo que me ha sugerido, la comento a vuela pluma . Porque  Tolstoi refleja aquí  la verdad de la vida. Tenemos los desengaños de Iván con su matrimonio, y su refugio en un trabajo y una clase aburguesada, para luego contemplar a través de su agonía, que todo en la vida eran mentiras que le enmascaraban cómo debía de haber vivido realmente. El lector se identifica plenamente con él, atisbando el egoísmo de aquellos a los que hace sufrir con su condición de enfermo, y de los que realmente lo han amado y respetado, como son su hijo pequeño y el criado Gerasim. El primer capítulo es el funeral, que he vuelto a leer, esta vez con más atención,  al terminar la obra, para ver qué ocurría en el mundo al morir Ilich, y en esa segunda vuelta he podido apreciar muchos más detalles ocultos que Tolstoi enmascara en su inicio, como son la actitud resignada de Gerasim, la rabia del hijo pequeño, hostil hacia los colegas del padre, la actitud aliviada en la viuda, y molesta  en los colegas de Iván, que rápidamente acogen un suplente del juez en su partida de cartas, y siguen ciegos, engañados con las seducciones del mundo. Casi veo el rostro de Iván en el féretro, hermoso e imponente, pero serio, lanzando su advertencia a los vivos y a todos los lectores. Leyendo los últimos pensamientos de Iván, sobre la muerte como un tren que arranca hacia atrás en un túnel, no he podido evitar pensar que esta obra, y no  Guerra y Paz o Anna Karenina, sería en la que Tolstoi pensaría en su último día, acorralado también por la muerte, y no en su casa como Iván, sino en una estación de tren. Una vez más, la vida imita al arte o Dios tiene inextricables motivos para cada uno. Pero La Muerte de Iván Ilich está tan bien escrita, que uno pensaría que Tolstoi ya ha pasado por la experiencia de la muerte y ha resucitado para contarla y lanzarnos una gran advertencia. Me temo que esta historia se quedará instalada para siempre en mi cabeza., 

miércoles, 25 de septiembre de 2013

Capítulo 30: LA ISLA DEL DOCTOR CRICHTON


Se ha estrenado recientemente en cines la versión 3D de Jurassic Park, clásico del cine popular donde los haya, y que a su vez se basa en uno de los títulos emblemáticos de eso que lleva la etiqueta de "best seller" y que puede referirse a prácticamente cualquier cosa, de cualquier género y con cualquier intención.

El autor del libro fue Michael Crichton, quien durante unos años antes y después de aquel, su mayor éxito, se mantuvo con firmeza en el podio de los escritores de "thrillers tecnológicos" más leídos en aeropuertos y metros del mundo entero. No es que tengamos que dejar al margen otros títulos de renombre como La amenaza de Andrómeda (1969) o El hombre terminal (1972), y tampoco su estupenda incursión en el cine como director de El primer gran asalto al tren (1979)... pero lo de Jurassic Park (publicado en 1990) fue verdaderamente enorme en cuanto a su repercusión en la cultura popular.

Michael Crichton

Que sí, que el boom de los dinosaurios debe más a la mercadotecnia de un muy inspirado Steven Spielberg que a cualquier otra cosa, pero quienes descubrimos la novela de Crichton en medio de aquella parafernalia mediática nos quedamos muy gratamente sorprendidos. Jurassic Park es un libro realmente excelente, una de estas escasas obras de la ciencia-ficción que, pasados los años de la edad de oro de Asimov y similares (y no viniendo de un autor enrolado entre los especialistas), parece capaz de retrotraernos a aquellos tiempos primitivos en que cada nueva obra era todo un ejercicio de creatividad teórica sobre la ciencia y la tecnología.

Prácticamente estamos hablando de los tiempos de Julio Verne, de H.G. Wells, de Aldous Huxley, e incluso de Mary Shelley, cuando se idearon los conceptos básicos de los que después beberían los autores del género ya consolidado: viajes en el tiempo, distopías, máquinas imposibles, doctores locos jugando a crear vida... De algún modo, Michael Crichton logró dotar de magia, de sentido de la maravilla, a algo que hasta aquel momento pertenecía al mundo de los laboratorios, envuelto en una jerga hermética: la ingeniería genética, que en el libro sirve para clonar bestias del pasado remoto a partir de sangre fósil. Y no hablemos de la teoría del Caos, que es utilizada como hilo conductor, en boca del doctor Ian Malcolm, para explicar -a fin de cuentas- la terrible posibilidad de que estos monstruos de Frankenstein vuelvan a conquistar la Tierra. Lo cierto es que la novela profundiza bastante más en ambas cosas que la película, de modo que no podríamos hablar de que sean obras intercambiables.

 Cartel de la película, por si alguien no lo conocía.

Y lo mejor de todo el asunto de Jurassic Park, libro y película si se quiere, lograron de algún modo el propio milagro tecnológico que proponían: la "resurrección" de los dinosaurios, unas criaturas fascinantes que, por lo general, se apolillaban años antes en forma de ilustraciones "kitsch" en libros de texto amarillentos. Pocas veces antes de aquellos primeros noventa habían jugado así los niños con sus triceratops y braquiosaurios de plástico, y nunca tantos infantes habían sido capaces de memorizar listas de nombres técnicos en latín que otrora hiciesen palidecer a los estudiantes de paleontología. Los dinosaurios resucitaron para la cultura de masas, y todavía no se han ido. Qué buenos recuerdos.

viernes, 20 de septiembre de 2013

SEGUIMOS LEYENDO

La tertulia ha vuelto a reunirse para poner en común sus lecturas. Comenzamos con dos ensayos:

GENERACIÓN-X, de Douglas Coupland, es un libro famoso porque por primera vez puso nombre a los treintañeros desilusionados que habían crecido con todas las comodidades y que frente a un mundo que les es hostil, se amparan en el derecho a no pedir y vivir en una falsa dorada medianía sin poder recibir nunca una jubilación. Esa apatía, tratada con humor, está ahora más de actualidad que nunca. por eso comentamos que es un buen momento editorial para escribir sobre nuestra ESO y los Ni-Nis. Recomendable. 

LA HISTORIA JAMÁS CONTADA DE MARVEL COMICS, de Sean Howe, es un tocho que analiza el primero imaginario y luego real y mágico Bullpen Marvel, desde Stan Lee a Roy Thomas y Jim Shooter, hasta la debacle de la editorial en los 90, y su resurgimiento millonario gracias al cine y su adquisición por Disney. A veces parecía un libro de empresariales, pero buenísimas las anécdotas y la épica y trágica a la vez vida de Jack Kirby, que fue el impulsor de todo y el que menos dinero percibió nunca. Si Kirby, Neal Adams, Romita, los Buscema y Jim Starlin hubiesen dado el paso de Liefeld, MacFarlane, Silvestri y Jim Lee, hoy serían ellos los millonarios, y no Downey JR, Avi Arad o Stan Lee. Recomendable. 

La tarde continuó con los comentarios a los cuentos GÓTICOS  de Arthur Machën, y también con  una  novela sobre el terrorismo en Argel a principios de los 90, de Fellag, que nuestra lectora en francés  traduce al castellano como "EL ENCENDEDOR DE SUEÑOS BEREBERES", con registros cómicos y dramáticos en torno a un escritor perseguido por el régimen. Recomendable. 

Terminamos con EL TERROR, de Dan Simmons, sobre la expedición Franklin para atravesar el paso del Noroeste en Canadá, con barcos escollados en los hielos, hambre y penalidades. Cada persona real de la expedición tiene un papel de peso en una historia muy realista, de no ser por la presencia de un monstruo que se apuntó que personifica lo extraño, el miedo. Imprescindible. 

martes, 3 de septiembre de 2013

LA TERTULIA CARMESI

Llevamos poco más de un año reuniéndonos en la Cafetería La Clave una vez al mes para hablar sobre libros, y como moderador, a partir de ahora voy a levantar  acta aquí de lo leído. De muchas de las obras analizadas ya hemos realizado entradas (Los cantos de Hyperion de Dan Simmons, La Torre Oscura de Stephen King, Harry Potter, Moby Dick etc.) Y aunque cada uno lee lo que le da la gana, ha habido un acercamiento a los libros puramente históricos quizá sintiéndonos culpables por embebernos tanto en la SF. Así, tenemos:

EL RÍO SAGRADO Primera de una trilogía de Wilbur Smith ambientada en Egipto, a la que siguen EL SÉPTIMO PAPIRO y EL HECHICERO. Recomendable.

LAS ISLAS DE LA IMPRUDENCIA, de Robert Graves. En ella, los españoles intentan infructuosamente conquistar la Polinesia, luchando contra enfermedades en un clima de sueños rotos por El Dorado. Imprescindible, por su minuciosa ambientación.

EGIPTO EN EL TIEMPO DE LAS PIRÁMIDES, de Guillenette Andreu, es un ensayo sobre gremios, sociedad y vida cotidiana de la civilización egipcia. Recomendable.

LOS DESORIENTADOS, Y LAS CRUZADAS VISTAS POR LOS ÁRABES, ambas  de Amin Malouf, la primera sobre el reencuentro de amigos de la infancia dispersos que se juntan en Palestina. Recomendable.

YO CLAUDIO, de Robert Graves, sobre las intrigas políticas villanescas de un descendiente de Marco Antonio, escrito en forma de diálogo directo con el lector. Es a la novela histórica una lectura obligatoria

LOS HÉROES, de Joe Abercrombie habla de una gran e imaginaria batalla medieval. Entretenido.

Hubo espacio para algunas reseñas de Ciencia Ficción como LA GUERRA INTERMINABLE  de Joe Haldeman, un libro antibelicista de batallas de miles de años y sin sentido, de naves espaciales. Recomendable. Y también se habló de la PIEL FRÍA de Albert Sánchez Piñol, que mezcla a Lovecraft y el erotismo buscando el mal gusto a drede (Pasable)

Una última recomendación hacia los autores Lao-Che, Mo-Yan, y Haruki Murakami (1Q84) cerró la tertulia emplazándonos  a estudiarlos.

miércoles, 24 de julio de 2013

HASTA PRONTO

Estamos cerrados a la espera de dar un lavado de cara al blog. Posiblemente acojamos aquí las actas de lectura de una tertulia literaria que montamos hace un año. Pero antes de despedirnos,  hasta entonces, dejo pensando a los lectores de la Trilogía de New York de Paul Auster mi hipótesis sobre el misterio que encierra, tras mucho repensar la Habitación Cerrada.  

Paul Auster es Fanshawe. Que cambió de identidad. Y antes de eso, Fanshawe fue Quinn. Y el cuaderno rojo contiene la narración de Fantasmas, en el que Fanshawe es el señor Azul, y su amigo, casado con su esposa, el señor Negro. Y en el libro materializaría la fantasía de matarlo, que no cumplió, pero sí escribió.

En fin, la solución a estas novelas metafísicas, quizá ni Paul Auster la tiene muy clara.  

lunes, 27 de mayo de 2013

LA MÁQUINA DEL TIEMPO (Y 2)

Reescribiendo acerca de nuestras entradas más visitadas, (novelillas  del oeste, Von Däniken y La máquina del Tiempo) me intriga por qué una entrada que no era sino una reflexión sobre el experimento ópera sigue siendo la más visitada mes tras mes. El Conde dice que seguro que en algunos IES la habrán mandado leer, así que vamos a reseñarla bien. La obra de H.G. Wells comienza cuando el anónimo viajero del tiempo hace una demostración a unos amigos enviando un modelo en miniatura de la máquina al futuro, para luego y ante el asombro de todos enseñarles la versión ampliada del mecanismo. La máquina era flipante, un asiento regencia encajado en un armatoste con palancas de níquel, cuarzo y marfil. Los físicos de Big Bang Theory la compraban para jugar en un capítulo, para asombro de su vecina Penny. Lo peculiar de este diseño, es que, al contrario que en otros, es el tiempo el que avanza alrededor de la máquina, como bien mostraba la peli de Guy Pearce. El problema que se me plantea es lo imposible de que en ningún momento ningún objeto ocupe el lugar que  la máquina y el viajero ocupan, fusionando los átomos de ambos.
De cualquier forma, el pasajero viaja a una Edad Dorada de Londres en el año 802.001, y allí, porque Wells quiere que no se mueva,  le roban la máquina, y lo mismo hubiera dado escribir que se la lleva la grúa por dejarla mal aparcada, ja, ja. En un aparente paraíso de los pacíficos Eloi, unos albinos morlocks ocupan un vasto submundo donde se realiza el trabajo para el mundo superior. Allí vive sus aventurillas, planteando el problema de todas las novelas de Wells, y es que agotan sus posibilidades demasiado pronto, porque, una vez has convencido al lector de que tienes una máquina del tiempo, lo que quieres es viajar, y te dan igual los Eloi y la indígena Weena. Quizá lo mejor de la novela es el tramo en el que él viaja al final del mundo, en un futuro en el que la Tierra se ha detenido y ofrece siempre la misma cara al Sol, con un cielo rojo y cangrejos grandes como mesas y un pulpo gigantesco.  El viajero llega a contemplar incluso  una nueva glaciación y un sol apagado. 
El único testimonio que queda de la vida son las florecillas que Weena le puso en el bolsillo. Cuando vuelve a su presente, relata agotado la historia, pero ninguno de sus colegas, salvo el narrador, le cree. Todo culmina en un gran cliffhanger cuando el viajero lleva una cámara fotográfica con trípode y parte de nuevo para conseguir pruebas de sus viajes, dejando a su amigo esperándole inútilmente. ¿Qué le ocurrió al viajero del tiempo? Esta pregunta no la he visto retomar nada más que a Alan Moore en su relato corto Alan y el velo rasgado. Por último, La máquina del tiempo fue también una serie de novelas juveniles de los mismos creadores de Elige tu propia aventura.

VON DÄNIKEN Y JJ BENÍTEZ


Estos dos autores son coimaginautas  al crear unas tesis de ciencia-ficción alrededor del Antiguo y Nuevo Testamento. Benítez acaba de publicar El día del relámpago, un apéndice a sus nueve Caballos de Troya, algo así como un premio a los lectores o un libro construido sobre subtramas o material eliminado en la construcción del anterior, algo así como los extras del DVD, que sería desleal bautizar como Caballo de Troya 10. Sumando los 10 libros, tenemos la saga más larga de la Literatura Española ¡más páginas que Juego de Tronos! 
Von Däniken habla de que el cataclismo que aniquiló a los dinosaurios fue un exterminio programado de seres extraterrestres que lucharon contra ellos apostando por la pervivencia de los mamíferos, creando vida en la tierra a imagen y semejanza de los "dioses del espacio", que entablarían contacto con las primitivas grandes civilizaciones. Algunos de esos hombres espaciales intentarían conquistar el planeta azul (Satham, Azazel, Baal-Zebú) pero en una guerra civil entre ellos, se aniquilarían las facciones díscolas (Atlantis, Sodoma, Gomorra) dejando algunos supervivientes leales (Lot, Noé) a los astronautas Yahvéh, Rá, Enoch etc. Según Von Däniken, esos hombres del espacio enseñarían a los hombres primitivos el secreto del fuego, la agricultura, el regadío, y proyectarían torres que funcionasen como antenas de radio y helipuertos de pequeñas naves. Uno de esos hangares, Babel, sería destruido y sus obreros bombardeados con drogas y primitivas armas químicas.


Esta reinterpretación de las religiones como encuentros con extraterrestres sería revisitada por J.J. Benítez, para el que está clarísimo que en la Luna hubo una estación alienígena destinada a observar nuestro planeta, y que  en su libro Los astronautas de Yavé llega hasta Cristo y su resurrección como una técnica de una raza más avanzada que la nuestra, para pervivir en un cuerpo ¿clonado? 

El problema de los dos autores es que sus tesis están llenas de suposiciones y que rompen la cadena probatoria en algún momento en el que la fantasía los desborda, entrando por tanto en el campo de la Ciencia-Ficción pura, no de anticipación, sino de la "historia encubierta" de nuestro planeta. La mujer de Lot no murió por la onda expansiva de una radiación letal, sino porque alguien escribió antes el mito de Orfeo y Eurídice. De tanto repetir que nuestro planeta ha sido visitadísimo por civilizaciones extraterrestres durante la historia, los alienígenas han debido de volverse muy discretos.   

lunes, 20 de mayo de 2013

EL PULP ESPAÑOL

A veces me he preguntado por qué en España sólo funcionaron los pulp del Oeste, y no los de otras temática. Es significativo que el éxito de estos autores hizo que los editores españoles dejaran de traducir western americano ¿para qué, si Marcial Lafuente Estefanía podía escribir una o dos novelas a la semana? Mientras al otro lado del charco Alan Le May publicaba Centauros del Desierto aquí José Mallorquí sacó sus 192 novelitas del Coyote, con la editorial Clíper. De forma sincrónica con los grandes autores norteamericanos de literatura del Oeste, Francisco González Ledesma firmaba como "Silver Kane" cuando aparecían en EEUU el Indian Country (volumen de cuentos en el que se basan los films como "El hombre que mató a Liberty Valance" o "Un hombre llamado caballo") o Las aventuras de Jeremiah Johnson de Vardis Fisher. Nuestros títulos eran más castizos: "¡A por ellos!" "¡Sólo me queda una bala!" o "La banda del cobra". De cualquier forma, debería de estar en los libros de texto de novela social de posguerra un apartado consagrado al increíble éxito editorial de la única Edad de Oro Pulp que ha habido en España, con la Biblioteca Oro, las ediciones de Juventud o la "novela aventura" de Hymsa. Unas décadas en las que lo que más se vendía en España no eran las crónicas rosa de un presentador de TV, sino las aventuras que escribieron Ernest Haycox y Zane Grey cuando se habían agotado las de Estefanía, Mallorquí y Silver Kane.

lunes, 29 de abril de 2013

FANTASMAS, DE PAUL AUSTER

He leído tantas novelas negras que ya creía el género agotado, así que me lancé con la Trilogía de Nueva York de Paul Auster, que dio en los ochenta una vuelta de tuerca al género creando una nueva figura del investigador: la del detective metafísico. Ya cuando empezamos con este blog, El Conde hizo una entrada genial sobre la figura del detective en la que mencionaba estos relatos, y no ha sido sino por sus siempre buenas recomendaciones que compré el libro y lo leí (tres años más tarde!!)  Fantasmas, abunda más en la peripecia de esa labor de vigilancia que ya teníamos en La ciudad de cristal, en la que el detective se olvida de sí mismo, ensimismado en el otro, como metáfora de la lectura, con referencias al Walden de Thoureau. Este cuento para hablar del metalenguaje trataba ya de un lenguaje oculto y olvidado tras Babel. En Fantasmas, los nombres de los personajes son sustituidos por colores, y el señor Azul es un personaje que tiene un cometido, atrapado en un cuento de misterio del que sólo hay una salida posible para poder dar fin al relato y descansar. Más bien pareciera que Auster explora la narración desde un punto de vista mágico, en el que al ir creando y leyendo, uno acaba atrapado en un maleficio o en una especie de sueño lúcido.  Me recuerda mucho al universo que crearon Dustin Hoffman e Isabelle Huppert en la película "Extrañas coincidencias".

miércoles, 24 de abril de 2013

ARGÓNIDA, MÁGINA, y REGIÓN, la España FICTICIA

Reconozco que ni seguía a Andrade ni a Caballero Bonald ni sabía más de ellos antes de ser premiados con los máximos galardones literarios de este país,  que los títulos de los libros en la biblioteca. Recuerdo ese  de Toda la noche oyeron pasar pájaros como un título enigma que invitaba a saber qué pasaba esa noche y por qué se limitaban a escuchar. Luego he sabido que Bonald desarrolla todas sus novelas en el Coto de Doñana, al que, como si fuera Terabithia, él transmuta en un pueblo imaginario de Andalucía, un espacio natural salvaje, amenazado por el progreso. Eso me ha hecho interesarme por Bonald, porque me gustan las geografías imaginarias. Antonio Muñoz Molina hizo lo mismo con Mágina, 
una ciudad ficticia de la Andalucía preindustrial y gris del franquismo, que aparece por primera vez  en Beatus Ille y sirve de escenario a posteriores. Además de Macondo de García Márquez (que parece que está muy malito)  quizá algún día debamos visitar también Región de Juan Benet

martes, 23 de abril de 2013

LOS CHICOS QUE COLECCIONABAN TEBEOS

Nunca había leído una novela "generacional" de la que de veras me sintiera parte. Pero esta novelilla me ha atrapado desde mis recuerdos, para definirme como "de la generación fórum". Todo estaba ahí, y gran parte de esas cosas las había olvidado, incluso el juego de siluetas intercambiables de monstruos y alienígenas de Geyper o la portada del 17 forum de "Los Nuevos Vengadores". Siguiendo una estructura parecida a "El Cuerpo" de Stephen King y cambiando la Literatura de "Deconstructing Harry" de Woody Allen por los cómics, frase final incluida, a mí los cómics también me han roto el corazón, pero reconozco que marcaron mi adolescencia. El número que no encontrabas, los especiales de Verano, la búsqueda por los kioscos, el estreno de Batman de Tim Burton, el VHS, las TDK  etc. Y he disfrutado de verdad, tanto, que es la primera vez que considero que su publicidad y bombo eran totalmente sinceros: Del viaje que va desde la serie de TV "V" y sus cómics en la revista Teleindiscreta al estreno de Los Vengadores, hay miles de historias y vivencias que darían para muchas más entregas. Quiero una continuación que deba llamarse "Los hijos de los chicos que coleccionaban tebeos". Pero claro, para que se escriba con la magia de ésta, quizá debieran  volver a pasar 35 años. 
Todo esto ocurrió. Si lo has olvidado, tienes que leerlo.

viernes, 19 de abril de 2013

Capítulo 29: HOMERO DESENCADENADO

Portada original de Ilión.

Acabo de terminar, después de más tiempo del que pensaba, el díptico Ilión y Olympo, del norteamericano Dan Simmons. Me ha costado trabajo acabarlos, más por su longitud que por la dificultad de su lectura, pero las impresiones no pueden ser mejores. Cuando leí el gran clásico de Simmons, Hyperion, pensé sinceramente que se trataba de una de las mejores obras de ciencia-ficción con que me había topado. Su segunda entrega, La caída de Hyperion, posee una calidad enorme a la altura de su precedente, si bien gran parte de la magia de Hyperion -que se encuentra en su estructura- quedaba perdida, con lo que la historia quedaba un pelín descompensada. Cuando terminé Ilión hace unos meses, anonadado ante el despliegue brutal de imaginación de su autor, temí que Olympo pudiese quedar de nuevo opacado por su predecesor. Afortunadamente, me equivocaba.

Portada original de Olympo.

Publicados en 2003 y 2005, Ilión y Olympo mezclan la guerra de Troya tal como Homero la narrase en la Ilíada con una complicada trama que combina educados androides de corte asimoviano, entidades alienígenas salidas de La Tempestad de Shakespeare e intrincadas teorías sobre física cuántica, todo ello enmarcado en un multiverso tan imposible como fascinante. Sin desvelar excesivos datos argumentales, la cosa puede resumirse en cuatro tramas: 

1. La de los posthumanos, una raza humana futura tan evolucionada tecnológicamente que se ha permitido la extravagancia de tomar la forma y atributos de los dioses griegos e instalarse en el monte Olimpo de Marte, viajando en el espacio-tiempo hasta los días de Aquiles y Héctor y vigilando mediante la presencia de eruditos infiltrados en la guerra, (como esas asociaciones yankis que se reunen los fines de semana para recrear la Guerra de Secesión) que el poema homérico se desarrolle tal como lo conocemos. Una épica bestial en la que pequeñas variaciones  imprevistas se irán expandiendo como las ondas en el agua.

2. La de los humanos antiguos y corrientes, convertidos en algo así como los Eloi de La máquina del tiempo, que viven para el placer y la fiesta en un planeta Tierra adaptado a sus caprichos, y que en el pasado ha sufrido enormes cataclismos que nadie recuerda. Tendrán que reaccionar a tiempo cuando su idílica situación cambie radicalmente de un día para otro.

 Portadas de ediciones posteriores.

3. La de los moravecs, cultísimos cyborgs del Cinturón de asteroides que deciden tomar cartas en el asunto cuando la actividad cuántica del Sistema Solar se desboca. Simmons retoma aquí su idea de Hyperion sobre el mundo de las inteligencias artificiales que se han independizado pacíficamente del dominio humano.

4. La de Próspero, Calibán, Ariel y el bizarro monstruo Setebos, que irán urdiendo los hilos hasta enredar todas las demás tramas. Aquí prefiero no contar nada, entre otras cosas porque sigo intentado atar cabos en mi cabeza.

Portadas de dos de los cuatro tomos de la edición en castellano, en bolsillo.

La impresión general es que Dan Simmons vuelve a reivindicarse como el más potente autor del género en la actualidad, entre otras cosas por la osadía que supone la mezcla de argumentos antes descrita, y sobre todo por combinar con mágica eficacia aventura, acción, fantasía, humor, amor y algo de sexo, sacando punta de paso a personajes tan jugosos como los mismísimos Odiseo, Zeus o Helena de Troya. Algunos giros argumentales (pese a lo deliciosamente inverosímil de las situaciones) hacen erizarse los vellos de uno. Simmons certifica de una vez por todas -y creo que nadie lo ha hecho tan claramente antes- que la ciencia-ficción, manejada con talento, sirve para contar cualquier tipo de historia, precisamente porque dentro de sus límites cabe absolutamente cualquier cosa. Y qué bien te lo pasas.

jueves, 11 de abril de 2013

FALLECE JOSÉ LUIS SAMPEDRO

Lejos de los epitafios hagiográficos de el autor de "El río que nos lleva", al que todo el mundo ahora recordará a través de su impulso vital al movimiento 15M , yo voy a ir muy lejos en mi recuerdo personal del autor. Estaba en 2º de BUP, tenía 15 años, y debí de caerle en gracia a una profe interina del instituto, que me regaló dedicado "La Sonrisa Etrusca", porque, según rezaba la dedicatoria "le había sido muy grato darme clase" . Como a esa edad yo juzgaba a un libro por las portadas, y estaba más embebido en saber si Cable era el hijo del futuro de Scott y Jean, que en la historia del abuelo que quiere dejar un legado a su nieto, mi lectura fue muy superficial. Tanto,
 como para poder comentar algunos aspectos con la profesora, y ver que le agradecía ese libro. Un año más tarde, cuando lo releí con detenimiento, quedé atrapado en los diálogos del anciano sentenciado a muerte, con su enfermedad. Y lloré con la última línea del libro, que en definitiva trata del sentido de la vida. Y no recuerdo ni el nombre de la profesora, porque su firma era indescifrable.  Pero gracias  al autor, por la lección que no supe aprender, y a la profesora interina dondequiera que esté. 

viernes, 29 de marzo de 2013

Capítulo 28: LA EPOPEYA DE CHRISTOPHER TOLKIEN

J. R. R. Tolkien falleció en 1973, dejando una cantidad monstruosa de textos inéditos pendientes de ser ordenados y dispuestos para su publicación. Christopher Tolkien, albacea de su padre, se encontró abrumado ante tan descomunal tarea y, pensando en concluirla cuanto antes y de la mejor manera posible, renunció a su puesto como profesor y se dedicó a recopilar versiones en prosa -más o menos resumidas- de la obra que su padre siempre concibió como la más importante de sus creaciones: "El Silmarillion". Quiso que el libro viese la luz cuanto antes para poder continuar con su propia vida, pero tuvo que ajustar ciertos elementos de la mitología un poco a la fuerza para darle una coherencia que su padre todavía no había afinado del todo a su muerte; de modo que Christopher sintió que, en cierto modo, había "empobrecido" los esfuerzos de su padre durante más de medio siglo cuando El Silmarillion tal y como lo conocemos se publicó en 1977.

Un octogenario Christopher Tolkien (imagen de theonering.org).

La solución: deshacer el entuerto mediante una publicación ordenada y comentada de la monstruosa colección de manuscritos que se encontró en casa apilada en cajas y sin clasificación alguna, realizando al mismo tiempo el trabajo de un filólogo y el de un detective. El resultado es la serie de 12 volúmenes titulada Historia de la Tierra Media, que se publicó poco a poco -pero con excelente puntualidad- entre principios de los ochenta y finales de los noventa. Los ocho primeros tomos abarcan desde los comienzos de Tolkien en sus paseos mentales por las tierras de los elfos, identificadas con paisajes dunsanianos y reminiscencias localistas y nacionalistas británicas, hasta los escritos más sólidos que pasarían a estructurar de manera definitiva su mitología sobre las tretas del malvado Morgoth, el robo de los Silmarils, la persecución de los hijos de Fëanor y demás. En octavo libro incluye, para asombro de quien no lo sepa, nada menos que unas cuantas páginas de lo que iba a ser la secuela de El Señor de los Anillos, un manuscrito titulado La nueva sombra, de la que hablaremos en otra ocasión. A partir del noveno tomo, la serie se centra en la escritura paso a paso de El Señor de los Anillos, como ya comentamos en una entrada anterior sobre Tolkien.

Portada de la edición en castellano, de Minotauro.

Cayó en mis manos hace años, gracias a una colección de kiosco, el tercer tomo de la serie, titulado Las baladas de Beleriand (1985), y después de criar una década de polvo, he terminado por leerlo de un tirón. Por suerte, he comprobado que cada libro puede leerse de manera independiente, ya que el material tratado viene bastante bien ordenado dentro de la serie. La verdad es que es mucho más una obra de investigación literaria que una narración en sí, pero he disfrutado como un enano leyendo los dos poemas épicos que contiene en su estado original, "no resumido". Se trata de la Balada de los hijos de Húrin, que después se publicaría definitivamente en versión novelada; y de la Balada de Leithian, que, sospecho, antes o después también se verá publicada como obra independiente y también novelada. El primero de los poemas épicos se centra en la azarosa vida de Túrin Turámbar, y es un ejemplo del tono amargo y pesimista (un tanto bíblico) de la mitología tolkiana sobre la "Primera Edad". Se encuentra, lamentablemente, bastante incompleto, ya que su autor se pasó décadas reescribiéndolo y actualizando nombres y datos geográficos, pero sin llegar a completarlo.

El segundo poema cuenta la bastante más amable historia de Beren y Lúthien, un romance trágico entre un mortal y una dama élfica, que se queda bastante más cerca del final tal y como lo narra El Silmarillion. El tomo contiene también algunos otros poemas que prácticamente se truncaron nada más comenzar, pero Christopher Tolkien pretende ser exhaustivo y decide no saltarse ni una coma de lo que encontró en los fajos de papeles de casa. C. S. Lewis, amigo de Tolkien y autor de la saga sobre Narnia, aportó en su día una crítica algo pomposa del segundo poema, también recogida en el tomo. Parece que ni el propio Lewis comprendía entonces las intenciones creativas del viejo profesor de Oxford.

Edición en inglés.

Pese a ser extremadamente áridas, me atreveré a recomendar estas lecturas, si bien advierto que (tal como sugiere Christopher en el prólogo del primer volumen de la serie, El libro de los cuentos perdidos I) puede realizarse una lectura de este bellísimo material pasando olímpicamente de anotaciones a pie de página y comentarios filológicos. Descubrir pacientemente esta serie de libros, y lo digo ahora que he comenzado felizmente con el primero, es la verdadera manera de conocer de verdad la obra de este autor único, uno de los más influyentes de nuestro tiempo y, casi con seguridad, de los años venideros.

domingo, 24 de marzo de 2013

LA BÚSQUEDA ONÍRICA DE LA DESCONOCIDA KADATH


Este es el mapa de las Tierras del Sueño de Lovecraft. En uno de sus relatos, Celephais, cuenta una pequeña obra maestra de la evasión romántica que debería ser objeto de análisis por todos sus tópicos literarios. Ese mundo, a lo Tolkien, es ampliado en un gran relato sobre las 150 páginas de ciudades de ónice fosforescente y grabados secretos. Su capital, Kadath, es soñada y buscada por Randolph Carter. Nyarlathopeth posee finalmente al sumo sacerdote para comunicarle en plan premio que Kadath es la suma de todas las fantasías de la infancia de Carter, es una Nueva Inglaterra idealizada por la visión infantil perdida a la que se llega por la Puerta del Sueño Profundo desde el mundo Vigil. Es como cuando de críos salíamos a pasear y soñábamos despiertos que lo que recorríamos era otro mundo que íbamos imaginando al jugar. La conversación final entre el sacerdote y Carter me ha recordado a la mantenida por Bastian y el Sr. Koreander al final de La Historia Interminable.

martes, 19 de marzo de 2013

ALATRISTE A LA TELEVISIÓN

La película del Capitán Alatriste era un megatrailer que cogía lo que más había gustado de las cinco novelas, cosa que satisfizo a todos los espectadores lectores, pero que propició el fracaso ante el público general. Ahora, se prepara una serie inicialmente de 13 episodios, con Aitor Luna como protagonista. Los guionistas dicen que han dado a la narración un tono "muy luminoso", que "rezuma luz", según ha explicado el director general de Contenidos de Mediaset, Manuel Villanueva, y que la serie tendrá "vocación internacional".
 
Por ella desfilarán muchos de los personajes relevantes del Siglo de Oro, como el pintor Diego Velázquez, el dramaturgo Tirso de Molina y el conde-duque de Olivares, valido del rey Felipe IV, inmersos en situaciones de aquel tiempo, como la corrupción de los distintos estamentos sociales, la inoperancias de la Corte, las hambrunas y la Inquisición . Me ilusiona mucho porque precisamente comentamos cuando se estrenó en cines, que el formato ideal narrativo para estas sovelas, era una serie de televisión algo menos folletinesca y más realista  que el Águila Roja.

lunes, 11 de marzo de 2013

ÁLBUM DE CROMOS DE LOVECRAFT

AZATHOTH
En el universo lovecraftiano, Azathoth es la antítesis de la creación, el necio sultán de los demonios; el que roe, gime y babea en el centro del universo. Se lo describe como una masa colosal, caótica y sin forma, y el simple hecho de mirarlo fijamente supondría una muerte de horror y locura extrema. Alrededor de él danzan eternamente el resto de dioses exteriores siguiendo melodías demenciales. Aunque sea ciego y estúpido, el representa la omnipotencia en estado puro.

YOG-SOTHOTH
Es el omnisciente, sabedor de todos los secretos del Universo, te los dirá si eres un brujo que lo adore, y es el que manda, y no sé por qué, jua, jua, toca la flauta cuando visita a Azathoth. Stephen King lo menciona en la historia Los misterios del gusano como una especie de dios espacial que está detrás de los extraños sucesos de un pueblo abandonado.

          NYARLATHOPEP
  Es, al parecer, una gran masa poliposa con una larga excreción roja. No obstante, se caracteriza por adoptar diversas formas, una de ellas, el dibujo del flautista de la parte derecha de nuestro blog.
                                                CHULTHU
Es a los primordiales lo que Pikachu a los pokemon.  Su cuerpo escamoso está compuesto por una sustancia distinta a las que se encuentran en nuestro planeta, una especie de masa gelatinosa que lo hace prácticamente indestructible. De todos modos, incluso si su cuerpo físico es destruido por completo (cosa muy improbable), su naturaleza extraterrenal lo haría volver a formarse en horas. Fue uno de los conquistadores de la Tierra y dominó desde las profundidades del océano, en la ciudad de R'lyeh y lo adoran los profundos.

                                     HASTUR EL INEFABLE
 Existen relatos que lo describen como un dios de pastores. Es posible que el origen del nombre radique en la provincia Asturias al ser elegido al ser elegido por Ambrose Bierce al recordarle la palabra pasto. Garras, tentáculos, es otro que espera en no se qué constelación, para que se den las circunstancias propicias para volver a gobernarnos.

             
                                              SHUB-NIGGURATH

Es la cabra negra de los bosques, una enorme masa nebulosa de la cual sobresalen tentáculos negros, bocas de las que cae saliva, y cortas y retorcidas patas de cabra. Es muy adorada por los cultos druidas y bárbaros.

Hay muchos más, ampliados por el círculo de Lovecraft ( Clark Ashton Smith incluyó a Tsathoggua; Frank Belnalp Long a los perros de Tíndalos; Henry Kuttner a Nygotha; August Derleth a Cthugha, etc. )

Todos son los malos finales de un gran videojuego nunca escrito del todo.

Pero los primordiales no son lo único atrayente en el mundo de Lovecraft. Además de las ciudades mágicas del sueño Celephais, Kadath, están los libros que cuentan todos estos secretos: Cómo encontrarlas, cómo invocar a los primigenios, etc. Creo que estos son la relación completa. 

El Necronomicón- Los manuscritos pnakóticos- Los 7 libros crípticos de Hsan- El texto de R'lyeh- los cantos de Dhol - Los unassprechlichen Kulten de Von Juntz-

Lovecraft escribió también un libro de poemas "Hongos de Yuggoth".



LA PELÍCULA SOBRE ALLAN POE

Como lector de las obras completas de Poe desde adolescente, seguía con mucha atención la renovación de alguna película sobre él desde aquellos films de la Hammer de Roger Corman. Y quedé intrigado al saber que se barajaban dos: un biopic dirigido por Silvester Stallone, y una peli de seis horas en dos tramos a cargo de Tim Burton y Johnny Deep, sobre las Narraciones Extraordinarias. Ninguno de los proyectos dio fruto, pues Stallone hizo las secuelas de Rambo y el corolario genial a Rocky Balboa, y Tim Burton hizo su Alicia en el País de las Maravillas toda siniestra y fumeta. El proyecto rodó de director en director, e incluso antes de la muerte de Michael Jackson se barajó la posibilidad de un musical modernizando temas de Allan Parson's Project con Michael como Poe. El resultado final ha sido, no un biopic, sino un thriller literario a lo Mathew Pearl, con un John Cusack correcto al inicio y magistral en el final de la película. Dirigida por James Mc Teigue, con una buena puesta en escena y un regodeo innecesario en el gore, gana más cuando asusta con el suspense que con el asco. El asesino comete crímenes siguiendo los pasos de las muertes en los relatos de terror de Poe, y lo que podía haber sido una montaña rusa con, no sé, por ejemplo Nicolas Cage corriendo de aquí para allá (¡Vamos al tonel de amontillado! ¡Persigamos a ese gato negro!) es una intriga efectista y bien narrada, con una eficaz traducción de todas las referencias y subtextos que la hacen aún más disfrutable para los fans lectores. En la conversación final veo a Poe horrorizado al encontrar a su William Wilson, y esos matices Cusack los ha hecho bien. Aunque en mi mente, el Edgar Allan Poe perfecto, hubiera sido Robert Downey Jr. 

viernes, 8 de marzo de 2013

EL CICLO DE RANDOLPH CARTER

La primera vez que aparece este personaje es en el relato "La declaración de Randolph Carter", que se basa en un sueño que tuvo Lovecraft.  El personaje de Carter ha sido tomado posteriormente por otros autores, que lo han incluido en sus obras, así como en películas, cómics, juegos de rol y videojuegos. Es anticuario, escritor de fantasía, y cuenta con el don de la profecía. Uno de sus antepasados estudió magia y ocultismo en la Universidad ficticia de Miskatonic. El ciclo de relatos del personaje está integrado por: 

La búsqueda onírica de la desconocida Kadath

La declaración de Randolph Carter

La llave de plata 

A través de las puertas de la llave de plata

Para más información, recomiendo visitar la página de la Nueva logia del tentáculo

jueves, 7 de marzo de 2013

EN PALABRAS DE SU HERMANA MAYOR: REGRESÓ, PERO NO ES UN ÁNGEL

En mi decisión de obligarme a leer libros "espirituales", la providencia ha traído a mis manos "El cielo es real" que informa sobre  el testimonio de un niño de cuatro años  , que tras haber tenido en un hospital una experiencia cercana a la muerte, comienza a desconcertar a sus padres con aseveraciones sobre un lugar en el que ha estado, con todos los colores del arcoiris, en el que conoció a Cristo, a su bisabuelo, y a una hermana nonata que los padres perdieron durante la gestación del embarazo y de la que nunca le habían hablado. Voy a analizar este conmovedor cuento desde dos  puntos de vista, uno escéptico, con la cabeza, y otro crédulo,  con el corazón. 

Escéptico: Es muy sospechoso que el padre del niño sea un pastor protestante, y que la imagen del cielo descrita concuerde con cuentos bíblicos que ya pudieran estar instalados en la cabeza del niño, que se hayan reproducido de forma balsámica ante el trauma sufrido por su cuasi-muerte. Además, el niño habla de que su padre deberá estar en el ejército del cielo con una espada, con fantasías de poder típicas de las figuras de acción con las que juega. Creo que además, el niño ha podido ir enriqueciendo su fantasía viendo el interés que así despertaba en sus padres, y mucho más tras el nacimiento de un hermano posterior. 

Crédulo: El niño reconoce a su bisabuelo en fotos de juventud, como una persona que se le ha presentado en el cielo, y afirma que, mientras su padre agredía y maldecía a Dios por la enfermedad de su hijo, Cristo en persona estaba cuidando del niño, y se lo devuelve para que además dé testimonio del cielo. La enfermera jefe corrobora al padre que su hijo vive "milagrosamente", y las expresiones del pequeño Colton son TAN reales... como cuando afirma que Dios tiene rotuladores en las manos para referirse a las heridas de la cruz, o su negativa a identificar a Cristo con los arquetípicos retratos e ilustraciones infantiles, que todo induce a pensar que este niño de veras ha visto algo, o cuando menos de verdad ha tenido estas visiones. Me gustaría creerlo, y saber que la primera persona a la que vemos al morir todos y cada uno de nosotros es Jesús, que en palabras del propio Colton, murió para que todos pudiéramos ir a ver a su Papá. 

lunes, 4 de marzo de 2013

LOS LIBROS QUE DEBEMOS LEER PERO NO NOS ATREVEMOS A ELLO


Mi máxima empresa de lectura fue el Quijote, que me sorprendió porque lo que creía iba a ser un esfuerzo, se convirtió en una delicia. Sin embargo me avergüenza confesar que no he terminado el Club Pickwick, que apenas pude comenzar el Ulises o que quizá jamás tenga fuerza ni voluntad ni el tiempo adecuado para tragarme los siete tomos de En Busca del Tiempo Perdido. Estas obras maestras están ahí, esperándonos, mientras perdemos tiempo con el último best-seller- ladrillo- pasapáginas. Aún no he caído en la deserción total, pero sé que son maestras y desconmensuradas porque en algún momento trascendieron al autor. Cervantes, por ejemplo, había planeado una novela ejemplar, pero al ver el paisaje magnífico que tenía ante sí, se dejó llevar, quizá cuando aparece Sancho, el contrapunto, como el limpiabotas con el Sr. Pickwick o el judío cornudo Leopold Bloom para con Stephen Dedalus. Al narrador le suceden cosas extrañas. Cervantes en la cárcel. A Joyce lo habían dejado tirado en un callejón después de una soberana paliza, y un conocido lo había ayudado a levantarse y llevado a su propia casa, en la que el gran cegato borrachín concibe un título inesperado, Ulises. Marcel Proust huele una magdalena y una taza de té. Y comprende que después de la muerte de las personas sólo el olor y el sabor perduran más que los demás recuerdos en los mecanismos de la nostalgia. Yo mismo reconozco aún en el inmenso edificio del recuerdo el olor de una chaqueta de lana de mi abuelo, abandonada en un viejo armario de madera. Existe una vida literaria que no vemos porque no intentamos aclararla. Y estos libros que no nos atrevemos a leer, nos dan pequeñas pistas sobre ella. Lo malo es que están repartidas por infinitas páginas.

HECHOS TOCANTES AL DIFUNTO ARTHUR JERMYN Y FAMILIA. LA TUMBA


Una tercera categoría de los relatos de Lovecraft es la que concierne al atavismo, esto es, una semejanza con los abuelos criminales  o antepasados lejanos y terribles. Lovecraft convierte en terror la aparición de caracteres propios de antepasados, bien por un gen que permaneciese inactivo y se manifestara luego en una terrible maldición familiar, o porque un ascendiente manipule al protagonista desde el más allá. Es el caso del cuento Hechos tocantes al difunto Arthur Jermyn y familia, en el que sus ancestros no sólo descubrieron una civilización africana de chimpancés humanoides a lo Edgar Burroughs, sino que las deformidades y simiedad de la familia están basadas en las relaciones con una diosa gorila blanca. El cuento inventa todo un linaje y panteón familiar, hasta llegar a la destrucción mediante la revelación, intentando el personaje al final borrar su rastro para que se dude incluso de su misma existencia. En La Tumba tenemos a un heredero que es manipulado por fantasmas del pasado, y sale sonámbulo, obsesionado con el secreto que encierra el mausoleo familiar al que ansía regresar y ser enterrado, apartándose del mundo.

lunes, 25 de febrero de 2013

Llegan las "Cartas salvajes" de George R. R. Martin.

En un contexto superheroico que podría recordar vagamente el universo de los X-Men, llega este mes de marzo la primera edición en castellano de la célebre saga editada por George R. R. Martin, Wild Cards. Cada tomo de la colección, que a estas alturas podríamos considerar un pequeño clásico del pulp contemporáneo, recoge un grupo de relatos (algunos escritos por el propio autor de Juego de tronos) protagonizados cada uno por un personaje concreto de este microcosmos, con historias que se entrelazan hasta formar un todo coherente. Una especie de novela-mosaico montada a base de relatos sueltos. 


La cosa se inicia cuando un letal ataque biológico sobre población humana crea, entre los pocos supervivientes, dos grupos de mutantes con diversos y curiosos poderes: los Ases, que luchan en favor de las fuerzas del bien, y los Jokers, los villanos. De paso, Martin y su cuadrilla recrean una segunda mitad del siglo XX alternativa en la que, por ejemplo, Fidel Castro es un mito del béisbol profesional en los USA.

La intención de la editorial es que la serie de libros, ya bastante longeva para el público angloparlante, se vaya completando con una entrega cada dos o tres meses. El lanzamiento del segundo libro, por cierto, se prevé para el mes de junio.

PRÓXIMO ASTÉRIX EN OCTUBRE 2013


Tras recibir un más que tardío homenaje en el festival de Angulema, Uderzo ha colgado el lápiz  y cede el testigo de Astérix al dibujante Didier Conrad y al guionista Jean -Yves Ferri, que preparan la 35ª entrega de la serie, que no morirá con Uderzo y Goscinny, sino que les sobrevivirá y proseguirá como lo han hecho otros personajes tales como Spirou y Fantasio o Lucky Luke. Quizá debiera de haber hecho como con Umpa-Pá y dejar de explotar unos personajes gastados, pero el caso es que a lo largo de medio siglo son 34 álbumes traducidos a más de 100 idiomas y unas ventas planetarias de 350 millones de ejemplares. Está claro que la editorial no va a dejar que Astérix acabe nunca.

EL QUIJOTE EN CADA LECTURA


El filólogo Martínez Rico dice que "nunca acabamos de leer el Quijote aunque lo terminemos". Y tiene un libro en el que se analiza el modo en el que se ha editado a lo largo de los siglos, y el modo en que se ha leído. Unamuno, Ortega o Azorín lo interpretaron, tratando de explicar por qué un libro tan sencillo, tan accesible a todos, tiene un poder tan grande de alusiones simbólicas al sentido de la vida. ¿Cómo se llegó a convertir un libro cómico en un mito nacional? Se analiza en Tiempos del Quijote su lectura romántica en el XIX y la desengañada del XX. Así, comprender cómo se ha leído en cada época, nos ayudará a saber cómo lo hemos leído nosotros.

LAS VIDAS ROMÁNTICAS

La edad de los prodigios de Richard Holmes, subtitulado Terror y belleza en la época del Romanticismo, sigue las biografías que le interesa desarrollar. Si antes había estudiado las de Coleridge y Shelley, ahora  recrea algunas vidas de exploradores y científicos apasionados, que vivieron entre las tres últimas décadas del XVIII y las primeras del XIX.  Comienza por el antropólogo Joseph Banks, botánico junto al Capitán Cook en el Endeavour en 1769, y sigue con los aeronautas británicos y franceses, y el astrónomo William Herschel, el primero en postular seriamente la existencia de extraterrestres, luego va Faraday, el joven Charles Darwin etc. El libro se lee con el mismo entusiasmo que el que ellos llevaron a sus vidas.

jueves, 21 de febrero de 2013

POLARIS. EL CAOS REPTANTE. MÁS ALLÁ DEL MURO DEL SUEÑO.


Otra categoría de relatos lovecraftianos es aquella en la que el protagonista viaja a los mundos ocultos de los primordiales a través del sueño (Polaris) , reencarnaciones, telepatía o drogas como el opio (El caos reptante) . Todos parten del relato de Allan Poe "El extraordinario caso del Sr. Waldemar" en el que a través del mesmerismo el protagonista describía otro mundo de los muertos.  Esta absoluta evasión fue la que luego inspiró a muchos héroes de Weird Tales como John Carter, Phra el fenicio o Gulliver Jones. Coincide que en todos ellos el protagonista es un mindundi o un alcohólico, o drogadicto, que sin embargo es un gran guerrero o héroe en ese otro mundo en el que lucha contra una malvada raza alienígena que adora a un primordial. En el caso de Más allá del muro del sueño, un médico de un psiquiátrico se alarma al descubrir que uno de sus pacientes habla de una estrella recién descubierta, y de conflictos siderales ocultos. En Polaris, la estrella Polar, tan alabada por los poetas, aquí es un malvado observatorio de un ser malvado, y su perenne titilar en morse una advertencia de que sigue ahí.

miércoles, 20 de febrero de 2013

Javier Sierra, una debilidad personal.

Soy consciente del recelo que producen ciertos autores ligados a lo paranormal o conspirativo entre los lectores del blog. Aun así, y como ya dejé caer en alguna entrada anterior, siempre me he sentido muy agradado por el trabajo como escritor de Javier Sierra. Vale que La cena secreta se le quedó un poco descafeinado pese a tanto renombre internacional, y vale también que en su última novela El ángel perdido se pasara tres pueblos mezclando thriller tecnológico, extraterrestres y enigmas bíblicos, pero creo que este señor ha estado a punto de tocar la perfección -dentro de su género, claro- en obras tan estupendas como El secreto egipcio de Napoleón o sus excelentes ensayos.


A estos me quiero referir, ya que se ha publicado hace unos días El maestro del Prado, que promete ofrecer una visión "alternativa" de algunos de los óleos más conocidos del museo madrileño. Con que solo consiga acercarse a la excelencia de no-ficciones previas como En busca de la Edad de Oro o La ruta prohibida, será un libro más que satisfactorio. No es que uno comulgue precisamente con muchas de las teorías cuasi- (o pseudo-) históricas de Sierra, pero la manera que tiene este autor de narrar, de explicar y de ambientar son sencillamente sobresalientes. Información ampliada en la web oficial.

martes, 19 de febrero de 2013

DAGON, EL DIOS PEZ

En este blog somos deudores de H.P. Lovecraft, y me he propuesto ir clasificando sus cuentos poco a poco, como un álbum de cromos. Nos centraremos en los que pertenecen al Ciclo de Chulthu, ya que en ocasiones sus relatos son imitaciones de los de Poe, y no desarrolla su cosmos personal, como hizo después junto a sus "diletantes" admiradores. Así, obviaré cuentos como "El alquimista" (sobre un brujo que usa el elixir de la juventud para colmar una venganza sobre los descendientes de su enemigo) , y nos centraremos en el ciclo de los primordiales. 

Dagón es un relato sencillo con la fórmula que tanto éxito granjeó a Lovecraft. A saber, relatos en primera persona en los que ocurre:

a) Salto  del protagonista del mundo real a un entorno ignoto.
b) Exploración del paisaje fantástico a lo "Lord Dunsany"
c) Aparición del primordial (monstruo) y brusco descenso a la locura del protagonista, con final abrupto del cuento.


En este caso los pasos se cumplen con la visión de un grotesco Dios-Pez con brazos humanos, encaramado a un monolito negro entre un mar infinito de peces muertos.  Se muestra la repulsión que ocasionaba a Lovecraft el pescado y el miedo a las criaturas marinas que pueden estar ahora nadando en las simas abisales. Y a tenor de los últimos datos encontrados de peces -alien, calamares gigantes e incluso el kraken, este cuento da genuino regusto pulp de los de weird tales.

Este bicho, Dagon,  podría ser perfectamente la criatura de la peli "Monstruoso"

Dagon es también la mejor adaptación del Lovecraft al cine español, cortesía de la Fantastic Factory, tras las fallidas "La herencia Waldemar" y "La Sombra prohibida" en las que al menos salía Chulthu. En la peli de Dagón, que se inspiraba en el relato "La sombra sobre Insmouth" salía Dagón sólo tres segundos, pero la sorpresa y la ambientación eran muy buenas. Además, contenía la última interpretación de Francisco Rabal.

lunes, 11 de febrero de 2013

GUÍA PARA ELUDIR SITUACIONES DAÑINAS



Vaya por delante que Espido Freire es mi amor platónico. Es algo mayor que yo y es guapísima, sensible e inteligente.  Y si se me aparece y me dice como el mesías: Sígueme, yo voy. Vaya, parece que esta reseña no va a ser nada  objetiva, ejem, ejem. Pues como hace poco hablábamos aquí de la desvirtuación de los cuentos clásicos privando a los niños del reconocimiento de los retos que les surgirán en la vida, resulta que Espido ha dedicado todo un libro a eso. Los malos del cuento dice que tenemos el deber de recuperar las lecciones de las antiguas historias para nuestra propia supervivencia. Hoy día me sigue sorprendiendo la gente que tiene clarísimo que su principal preocupación es ser feliz ellos, y que nadie les venga a amargar  la vida, alejando con astucia todo lo que les pueda traer problemas. Esa defensa les será muy valiosa para ser felices. Quizá les leyeron los cuentos auténticos, los ilustrados por Arthur Rickman, en el que el niño ingenuo sale devorado, malparado o predestinado a sufrir. Y es que cualquiera que haya leído "Nieve, Cristal, manzanas" de Neil Gaiman, sabe lo que puede desvirtuarse un cuento clásico.  Espido disecciona aquí qué representan en realidad los vampiros, lobos, ogros, brujas, madrastras, suegras, hermanastras, vecinos, jefes, narcisistas etc. 

miércoles, 6 de febrero de 2013

BUENOS PRESAGIOS


Terry Pratchett y Neil Gaiman escribieron al alimón un libro bastante simpático que hoy día, al ser ambos famosos, promocionan como "de culto", y que ha sido reeditado "por la necesidad de los fans de reemplazar su vieja copia amarilla o pegada con celo" . Como todo lo que hace Gaiman, se autopromociona como una genialidad que siempre tiene  otra historia detrás en su manufactura, como cuando una estrella del rock cuenta el germen de una canción. De hecho, Gaiman siempre va de gafas de sol y chupa de cuero, es el divo de lo fantástico.   Lo venden muy bien. Trata de que el Anticristo ha nacido, en Gran Bretaña, pero una serie de errores lleva a que en vez de llevar una vida ajustada a su naturaleza, con una educación satánica, viva tranquilamente con una familia de clase media en un pueblecito cerca de Londres. Un demonio y un ángel se ayudan mutuamente para evitar el fin del mundo. Estos dos últimos y Newton, el soldado cazabrujas, son los únicos desarrollados, puesto que el libro tiene aire de gran astracanada, de obra de teatro de risa, con dos narradores omniscientes haciendo chistes y divagando con ironías británicas todo el rato. El libro no se puede tomar en serio, como le ocurre a todos los de la saga Mundo disco, y termina pareciéndose demasiado a una partida de rol,en la que el master y los jugadores se ponen de cachondeo, o a libros pretendidamente humorísticos e inteligentes como Guía del Autoestopista Galáctico.  El final es apresurado y anticlimático, y quizá por estar escrito entre dos, se nota que está repartido en cuentos o apariciones estructuradas. Hay un cuento de los cazabrujas;  otro de los 4 jinetes del Apocalipsis secundados por moteros;  otro del cambiazo de unas monjas locas de un bebé por el Anticristo;  otro de una pandilla de niños entre los que se encuentra el diablo, que pueden rehacer el mundo en sus juegos si se lo proponen;  otro con las profecías de una aprendiz de bruja etc. Los hijos de Anansi también tenía una trama que avanzaba a tontas y a locas, pero al menos su final era inesperado y sorprendente. El problema de Buenos Presagios es que es como aquella película, Dogma de Kevin Smith, muchos personajes interesantísimos corriendo de aquí para allá, sin apenas desarrollo, necesitando caminar todos hacia un final errático. Hubiera quedado mucho mejor como una serie limitada de cómics de aquel sello de los 90, Vértigo, o como arco argumental de Sandman.